¡Bienvenidos seáis todos, Muggles creyentes, magos de toda condición (mortífagos tomáoslo con calma), Squibs, elfos domésticos, Unicornios, brujilles travieses en general y Piticlers en particular!
Bienvenidos a una nueva crónica en nuestra sección “Hoy visitamos...”, donde La Fuga de Piticli & Friends tenemos el honor y el placer de contaros nuestro paso por el Barcelona Witch Market (anteriormente conocida como PotterCon, pero no se lo digáis a Warner...) en esta su cuarta edición.
Antes de empezar, queremos romper una lanza por la Organización del evento y su buena organización (valga la “rebuznancia”), cuando tuvo que cambiar las fechas del mismo, debido a las últimas elecciones generales que hemos sufrido este año.
El Edificio Histórico de la Universidad de Barcelona, que es donde se viene celebrando esta celebración de la magia actúa como colegio electoral, por lo que la Organización se vio obligada a lanzar un hechizo de traslación sin precedentes y mover toooodo el evento dos semanas adelante en el tiempo. Muchos asistentes que ya tenían su viaje organizado cargaron por este motivo contra ellos en redes sociales (y no tan sociales), pero vamos, quien tenga un poco de sentido común se dará cuenta que son circunstancias que exceden de su control y que bastante esfuerzo hicieron con poder trasladar todo un evento de esta magnitud sin casi ningún cambio ni perjuicio de programa, que parece que esto no lo tenemos en cuenta.
Así que desde La Fuga de Piticli, no podemos más que agradecer a toda la organización del certamen su esfuerzo y dedicación, así como a la Universitat de Barcelona por ceder un espacio tan magnífico y mágico, que le va al pelo a este tipo de eventos.
Lo primero que es reseñable es, en nuestra opinión, la crecida en afluencia con respecto a ediciones anteriores. Particularmente, sólo podemos comparar con el año pasado; pero habiendo llegado igualmente sábado por la mañana a la misma hora aproximadamente, tuvimos que hacer bastante más cola (casi rodeando el edificio, que no es Hogwarts pero tampoco es pequeño) que en la edición anterior. Bueno por un lado, porque se ve que este tipo de eventos va teniendo cada vez más aceptación y malo para nosotros, porque no pudimos asistir a la ceremonia de inauguración donde el Corocrux iba a interpretar piezas de la banda sonora de las películas. Otra vez será.
Esto hizo también que si queríamos asistir a una determinada charla o evento, tuviéramos que hacer más tiempo de cola por el aforo de La Sala Paraninfo o el Aula Magna.
Los puestos de artesanía, merchandising y demás eran todos (y me refiero a TODOS) susceptibles de haberse vuelto conmigo a casa. Desde vestimenta inspirada en los mundos de la magia por parte de El Costurero Real y más tiendas, hasta complementos de todo lo que un mago pudiera desear (fundas para tu varita, tarros de pócimas...), pasando por ilustraciones, fancines, camisetas... Todo con un gusto exquisito y hecho por fans y para fans.
Respecto a las actividades, nosotros particularmente echamos en falta alguna teatralización y rol en vivo más, aunque la calidad de las charlas, con invitados como Jose Luis Angulo (actor de voz y carrera impecables, voz de Voldemort en español) y Mr. Malkins (incansable en las redes sociales del mundo mágico), sólo por citar a dos, está fuera de toda discusión.
Más espacios y talleres dedicados a los más pequeños, y en definitiva, una muy buena experiencia para todos los que somos amantes de este mundillo mágico que tanto nos ha dado, y que aún tiene mucho que dar. Por ponerle un “pero”, aparte de las teatralizaciones que hemos comentado antes, vimos menos gente de la organización “cospleyzada” para la ocasión, que eso siempre ayuda y motiva; aunque por otra parte, pocos asistentes vimos que no llevaran su corazoncito vestido con algún tipo de atuendo, cuando no totalmente atrezado. Y si fuera posible, que los pases de prensa estuvieran disponibles con antelación, que ya sabemos que las entradas vuelan, y no nos queremos quedar sin... jejejejeje...
Como apunte final, decir que a la salida del evento seguimos con la ambientación y nos fuimos a buscar La Puerta Mágica en Temps Limit-Escape Room... Y la encotramos a tiempo! Todo un lujo para acabar el día. (Próximamente, la review).
No nos queda más que volver a dar las gracias a la Organización y a La Universidad de Barcelona por hacernos disfrutar así, y emplazaros a todos a que si queréis y podéis, volvamos a vernos el año que viene (esperemos que sin elecciones) para la quinta edición.
¡Un saludo, Piticlers!