SALVAR A SOROLLA

Saludos, Piticlers! 

Refugiándonos del calor estival, la fuga de Piticli visitamos hoy un escape en un prestigioso museo en el corazón urbano del centro de valencia. Un emplazamiento único que nos permitirá conocer algo más nuestro panorama artístico histórico, de la mano de nuestra afición preferida, el escapismo, trataremos de viajar al pasado y salvar la vida al mismísimo Joaquín Sorolla y todo su legado. Sin más dilación, apretaos el cinturón del Delorean, coged vuestras paletas y lienzos y pasemos a nuestros pintorescos parámetros:

TRATO:

Nos reciben con unos grandes 5 PUNTICLIS.

Pese a ser un juego de reciente creación, se nota la experiencia y profesionalidad que el equipo de Aula Grial acarrea con su museo. Desde los primeros contactos, hasta que salimos de sus instalaciones, nos hicieron estar más a gusto que Sorolla un día soleado en la playa de la malvarrosa.

AMBIENTACIÓN:

Obtienen con 2 PUNTICLIS.

Estamos ante un juego diferente de los habituales, donde la puesta en situación, vino dada por la misma Game Master, contándonos la historia del juego. Probablemente, a corto plazo puedan incorporar elementos decorativos o inmersivos que le den una mayor consistencia y ambientación a la introducción del juego y que hagan que mejore la experiencia.

ATREZZO/DECORADO:

Recogen unos buenos 3 PUNTICLIS.

Como hemos dicho, no es un escape al uso, sino más bien un juego de enigmas dentro de un museo, y esto hace que la partida transcurra con elementos reales, no recreados, que pueden ofrecer un mayor realismo, pero restar un punto de jugabilidad. Aun con esto, el entorno es adecuado para el transcurso de la partida.

JUGABILIDAD:

Finalizamos nuestra estancia con unos merecidos 4 PUNTICLIS.

Estamos ante una sala, no lineal en la cual el objetivo no es sólo regresar al presente, sino hacerlo habiendo salvado a Sorolla, esta doble misión hace el juego bastante atractivo. Pese a no tener un número elevado de enigmas, sí hay una variedad muy buena en ellos, y todos ellos integrados con la temática propuesta. Pese a que puede haber alguno más laborioso de lo habitual, logran tener el nivel adecuado.

Nosotros, pese a empezar más fríos que el cumpleaños de Pingu, una vez calentamos motores remontamos y salimos con ambas misiones conseguidas a falta de 10 minutos en tiempo record.

En definitiva, una sala de lo más educativa y didáctica, con la que hemos disfrutado y que por supuesto, recomendamos a todxs lxs Piticlers. No tardaremos en volver a visitarles en su segunda sala.

No queríamos despedir esta vuestra review, sin antes dedicarla al Equipo de Museum Rooms o Aula Grial (gracias por estas iniciativas culturales que tanto nos gustan), a las luces de Sorolla, a los niños en la playa (no confundir con los chicos del maíz) y a los que metemos el USB, no entra, le damos la vuelta, no entra, le volvemos a dar la vuelta como al principio y ya entra. 

Hasta la próxima, Piticlers!!