¡Venid, venid y pasad, viajeras y viajeros de lo fantástico!
Gracias por pasaros una vez más por La Gran Biblioteca a seguir leyendo las PiticliCrónicas, cuyo último capítulo hasta la fecha pasamos a relataros con presteza. Y no es otro que nuestra aventura en Naturia, El Bosque Encantado, de Excape Experience Altea, una maravillosa experiencia en formato hall escape que nos dejó con el mismo buen rollo que cuando esnifas Polvo de Hadas (que nos lo imaginamos, vaya, porque nosotros no sabemos el efecto, nos lo ha contado un amigo, que se está quitando...).
Como ya os imaginareis, al ser review en modo tester no utilizaremos nuestros mágicos parámetros, ni ubicaremos la sala en nuestro taumatúrgico ranking, pero no por ello dejaremos de proclamar las bondades de este bosque, que nos parecieron muchas y variadas. ¡Allá vamos!
Primeramente, si no conocéis Excape experience Altea, ya estáis tardando. Su sala Fuga de Alcatraz es, como dijimos ya en su momento, altamente recomendable y os hará pasar un muy buen rato sin ninguna duda. Ya cuando la visitamos este pasado verano, Joan (corazoncito y alma del proyecto) nos adelantó que se estaba cociendo una nueva aventura en forma de Hall Escape... Y el momento ha llegado.
Independientemente de que guste más o menos esta modalidad escapista, es evidente que, en los últimos tiempos, se está intentando que la interacción en este tipo de juegos vaya más allá de los objetos que puedas tener en tu espacio; por eso pensamos que Naturia lleva, en nuestra opinión, el concepto hall escape a un nuevo nivel. Sí, vale, estás en una única “sala”, por decirlo así, pero es que todo lo demás no tiene nada que envidiar a un escape room “propiamente dicho”.
Todo, desde la inmersión (que comienza días antes del juego), el acting, lo que ves una vez entras, la manera de enfrentarte a los juegos (variados y originales, y súper integrados en la historia) no sólo en tu espacio (y vaya espacio), sino por toda la sala, lo que va ocurriendo según avanzas en el juego... hace que sea una experiencia genial para toda clase de aficionados y aficionadas a este mundillo.
Como posible “pero” está el hecho de que a lo mejor alguien pueda sentir, sobre todo al principio, que hay demasiadas cosas para fijarse y tener la sensación de no saber muy bien por dónde empezar a tirar del hilo, pero como se nos apuntó al acabar, bien puede ser una oportunidad para “invertir” los primeros dos o tres minutos viendo todo lo que tienes, para luego durante el juego saber qué y cómo tienes que relacionar cada elemento. En definitiva, una experiencia más que recomendable, por mucho que un hall escape no sea tu tipo de juego; no te arrepentirás.
En las reviews modo tester, como ya hemos explicado, no nos gusta calificar con nota, pero sí con una palabra que represente o englobe nuestra experiencia en esta sala; y la palabra elegida en esta ocasión, es FASCINACIÓN.
Fascinación porque al entrar en Naturia pusimos los ojos como una liebre cuando la enfocas con las luces del coche (sorprendidos es poco), con todo lo que veíamos, cómo lo veíamos y lo interconectado que está TODO. Estamos más que seguros que causará el mismo efecto en todes cuando vayáis. Y porque nos sigue fascinando la valentía de la gente emprendedora, que con la que está cayendo tiene ilusión por poner encima de la mesa nuevas propuestas así de grandes.
También queremos destacar, el mensaje que lleva de forma continua esta experiencia, a favor del cuidado del cuidado del medio ambiente y de la naturaleza en general, que dados los tiempos que corren, nos encanta, y agradecemos.
No queremos despedir esta vuestra review sin antes dedicarla a Joan, de Excape Experience Altea, por querer contar con nosotros y por su simpatía y buen hacer, a los que recordáis que James McAvoy fue un fauno en Narnia (sí, hijo, sí), a quienes vais leyendo en el metro/autobús sin miedo a que se vea el título de fantasía épica que estáis leyendo y a las salas de escape, sin excepción. Gracias por seguir ahí.