THE EXIT VALENCIA
¿Os sentís seguros, Piticlers?
Nuestro Nido ya sí, pero confesamos que nos ha costado. Y es que jugar La Purga, de estos referentes del escapismo como son The Exit Valencia, con tan altas dosis de entretenimiento, adrenalina y culo apretao a partes iguales casi hace plantearnos el hecho de, si total, sale un Piticli menos de allí, pues tampoco pasa nada... Pero al final todo tuvo happy ending y venimos a contároslo. Así que cerrad bien las rejas, comprobad que tengáis el seguro de SAFE al día, que alguien vigile por la ventana y vamos con nuestros asediados parámetros.
TRATO: El noticiero avisa que faltan 5 PUNTICLIS para que empiece La Purga Anual.
ir a casa de tu abuela a merendar. Que sabes cuando entras pero no cuando sales, de lo a gustico que estás. No se nos ocurre mejor definición para todas y cada una de las veces que hemos cruzado las puertas de The Exit, ya sea en formación Piticli o acompañados por otros amigos. Han hecho marca de la casa el saber estar y hacerte sentir en casa y que lo que hacen les gusta tanto o más que a ti.
AMBIENTACIÓN: La sirena, sonando como 4 PUNTICLIS, anuncia que la cosa da comienzo.
Claro ejemplo de que para hacerte una intro acorde con lo que luego vas a vivir no hace falta una megasuperproducción, hacen falta ganas y saber lo que haces. Y si ya lo aderezas con las dosis justas de humor, jugando al despiste, ya hace que hayas entrado al trapo antes de entrar.
ATREZZO/DECORADO:
Oyes un ruido fuera, como si se hubieran roto 5 PUNTICLIS.
Tanto en este punto como en el anterior, no es necesario ser fan de las películas y serie de tv, todo está perfectamente integrado y explicado con lo que te han ido mostrando para que sepas a qué atenerte; no sólo es que te creas que estás donde estás, es que vas a olvidarte completamente de lo que hay fuera, si es que alguna vez hubo algo. Y si encima eres fan, sobre todo de la primera, te vas a encontrar pensando “¿Qué haría Ethan Hawke ahora??”. De quitarse el sombrero.
JUGABILIDAD: Te has salvado (un año más) por 5 PUNTICLIS.
Hilando con el punto anterior, todo integradísimo. Enigmas de toda la vida, pero adaptados a lo que estás viviendo, otros más novedosos y sorprendentes, que has de solucionar mientras miras por encima del hombro, y todo con un diseño propio, de los mejores que hemos visto últimamente.
En definitiva, una sala que creemos que le queda na y menos para convertirse en referente, si no lo ha hecho ya, del panorama escapista valenciano y alrededores. Absolutamente imperdible.
No queremos despedir esta vuestra review sin antes dedicarla a todo el equipo de The Exit Valencia (sois muy grandes), a los que se pasan las películas corriendo (están en mejor forma que muchos futbolistas), al miembro del equipo que siempre pregunta, cinco minutos antes de entrar “¿Y esta de qué va?” (si no lo tienes, es que eres tú) y a los cabroncetes de Los padres Fundadores. Y a la madre que los parió.
¡Hasta la próxima, Piticlers!