EL SECRETO DE LEI TSU

Nĭ Hăo, Piticlers! 

Bienvenidos a nuestro pequeño rincón de Todo bajo el Cielo, donde hoy os traemos la crónica de nuestro viaje por La Ruta de la Seda que el equipaso de Tecum Game Valencia tiene montado en pleno barrio de Velluters (todo está conectado). Más que un escape room al uso es más una suerte de Historical Mistery Room, como ellos mismos se definen, pero que no tiene nada que envidiar a nadie y perfectamente entra en el rango de lo que venimos haciendo y disfrutando por aquí, así que abrochaos la chaqueta (de seda, preferiblemente), tratad bien a vuestro camello (a ese no, al animal jorobado...), cálense bien el gorro manchú, llevad un buen cargamento de moreras para vuestros gusanos y vamos a por nuestros humildes parámetros. 

TRATO: 

Iniciamos nuestro periplo con 5 PUNTICLIS. 

Nuestro agradecimiento a Paloma por cómo condujo la velada en todo momento. Cuando decimos que no es un escape al uso, se nota en cosas como esta. Hemos tenido la suerte de recibir tratos excepcionales en otras salas, por supuesto, pero se nota que aquí forma parte de la experiencia total que Tecum Game quiere que disfrutemos; ya desde el contacto previo, la entrada al local y el rato pre y post juego, la calma y el buen hacer que quieren transmitir hacen que te sientas más a gusto que una cesta de gatetes al lado de la estufa.  

AMBIENTACIÓN: 

Nos acomodamos en nuestros carros con 3 PUNTICLIS. 

Todo muy en consonancia con la temática, arropados por el mismo local y por la intro histórica que Paloma, nuestra Game Master, nos hace vestida para la ocasión junto con un vídeo hecho por ellos donde se nos da más ambientación y algo más... Quizás no es la mejor inmersión, pero no se puede negar que queda todo claro y listo para empezar. 

DECORADO/ATREZZO: 

Disfrutamos de las maravillas del viaje con 4 PUNTICLIS. 

Todo lo que encontramos en la sala está distribuido con sumo cuidado y gusto, los objetos (todos originales, por lo que nos dicen, algunos incluso centenarios, qué miedo al tocarlos) ayudan a esa sensación de ser una fusión entre Indiana Jones y Marco Polo por un ratete, disfrutando tanto del juego como de lo que nos lleva a él. Si no se llevan la máxima puntuación, y sin spoiler, porque todo se encuentra al mismo nivel y se echa de menos para la excelencia el que puedas “subir, bajar, entrar o salir" (lo entenderéis cuando juguéis). 

JUGABILIDAD: 

Llegamos a nuestro destino con otros 4 PUNTICLIS. 

Todo está pensado y requetepensado para que, aun encontrándonos en un espacio relativamente limitado, una hora no se quede larga, más bien al contrario. Los enigmas están totalmente integrados con la historia y lo que tienes en la sala, de una manera lineal que te va llevando de A a B (ese puede ser un pequeño problema, si no arrancas pronto, puedes no saber qué hacer), donde te tienes que coordinar muy bien con tus compañeros. A destacar la casi total ausencia de electrónica en los juegos. Digo “casi”. 😉  

También mencionar que antes de comenzar nos dijeron que el récord estaba en 57 minutos, ya que es una sala de la que hasta la fecha tiene un porcentaje de éxito del 20%, cosa que nos dejó con los mismos ojos que una liebre cuando la alumbras con los faros del coche, pero no nos dejamos amilanar por ello y finalmente tuvimos un gran día, siendo capaces de batir esa marca saliendo en cincuenta minutos. No es algo que persigamos el hacer tiempazo en todas las salas, nos mueve más el disfrute, pero cierto es que una cosa así de vez en cuando es un acicate más. 

En definitiva, una sala con un punto de distinción frente a otras (no quiere decir ni mejor ni peor, distinto) que nos ha dejado muy buen sabor de boca y un rato muy disfrutable. 

No queremos acabar con esta vuestra review sin antes dedicarla al equipo de Tecum Game Valencia y en especial a Paloma (gracias por hacernos sentir en casa, nos veremos pronto), a los chinitos de la suerte, a todos los que hemos criado gusanos de seda, a los que habéis jugado a “Marco” “Polo” y no lo conocéis sólo por Padre de Familia, al incombustible Chino Cudeiro, a las películas de acción chinas, y a Jackie Chan (ahora que no nos oye Jet Li) 

Hasta la próxima, Piticlers!