El Museo del Emperador

Bienhallados, Piticlers de Todo Bajo el Cielo! Volvemos a reunirnos por mandato Imperial, para hablaros de nuestra última aventurilla. Resulta que varias piezas de la famosa colección del Museo del Emperador, de la Familia Imperial Asociación Cultural China, han desaparecido; Nuestra misión como expertos orientales Piticlers, no consistirá esta vez en prepararnos un Yatekomo en 1 min., sino en recuperarlas y lograr establecer el equilibrio entre el Ying y el Yang. Así que sin más dilación, Llamad a la Guardia de la Gran Muralla, apretaos la coleta y vamos a ello!

TRATO:

Obtienen 5 PUNTICLIS.

 Es muy, pero que muy importante, tener pasión por lo que haces. E intentar transmitir esa pasión a los demás. Presentarte lo que hacen allí, sin prisa, sin querer "echarte" para poder rehacer la sala más tranquilos... Eso dice mucho, y desde aquí, lo valoramos con la máxima puntuación.

AMBIENTACIÓN:

Logran 3 PUNTICLIS.

Normalita, explicada en persona, in situ, para que entres en situación con lo que tienes que hacer. Es de lo que suelen adolecer muchas salas, y algo de lo que muchos escapistas hablamos a menudo. Si es un punto en el que muchas salas han de mejorar, es éste.

ATREZZO/DECORADO:

Concedemos,  3 PUNTICLIS.

Dado que la sala va de lo que va, cuando entras ves lo que esperas. Quizás incluso más de lo que debería, ya que hay cierta sensación de aturullamiento, amontonamiento y algunas palabras más acabadas en "amiento".

JUGABILIDAD:

De nuevo, se llevan  3 PUNTICLIS.

Aún cuando el juego es bastante cooperativo e implica a todos los jugadores, ése hacinamiento quizás hace que pierdas un poco el hilo de los enigmas, que por otra parte pueden llegar a abusar de ser bastante parecidos en la manera de resolver. 

En definitiva, una sala entretenida donde se nota la pasión de sus creadores por la cultura asiática. 

No queremos dejar de dedicar ésta vuestra review a Familia Imperial Asociación Cultural China, por conquistarnos con su simpatía y buen hacer, a los restaurantes chinos que hacen un buen café (verdad que no es tan difícil??), al Pato Laqueado y a David Carradine, Dios lo tenga en su Gloria. O donde quiera, al Chino Cudeiro, a los añorados Chinitos de la suerte y a los sobres de Flan “Mandarín”.

 HASTA LA PRÓXIMA, PITICLERS!